Terapia Regresiva

Este método terapéutico que nos permite recordar para sanar, también se le puede llamar Sanación Akáshica, Regresión, Terapia de Vidas Pasadas…

Uno de los mayores promotores de la Terapia a vidas pasadas fue el psiquiatra Brian Weiss, que observó que algunos de sus pacientes llegaban a momentos de la infancia olvidados o incluso a vidas pasadas de una forma totalmente espontánea.

A lo largo de nuestra vida observamos situaciones que se repiten, reacciones automáticas frente a ciertos estímulos de las que no entendemos el por qué. Sufrimos miedos, fobias, soledad, abandono, ansiedad, sentimientos que nos bloquean y nos impiden avanzar libremente por la vida, incluso enfermedades físicas de las que a veces los médicos reconocen que tienen un factor psicológico.

A través de la Terapia Regresiva se va al origen del conflicto de donde derivan los bloqueos de la vida actual. No podemos cambiar el pasado pero cambiando la perspectiva de lo que ocurrió podemos solucionar todo lo que arrastramos y nos bloquea en la actualidad.

Las regresiones implican revivir hechos de la infancia que pudieron provocar un impacto emocional causante de los problemas actuales e incluso revivir el momento de la concepción, gestación, parto y evidentemente vidas pasadas, para desbloquear los conflictos del aquí y el ahora.

Revivir el trauma es necesario para desactivar de nuestro cuerpo las memorias ancladas (sanación física), conectar con la emoción que se produjo y permitirnos liberarla para que se produzca la sanación emocional. De esta forma se produce una profunda toma de conciencia que se obtiene de la comprensión de los patrones de conducta enterrados en el subconsciente, que reprogramándolos, si es el caso, nos llevará a la sanación mental.

La Terapia Regresiva está indicada a las personas cuya vida no fluya adecuadamente, bien por enfermedades físicas, por emociones o creencias limitantes, bien por repetir situaciones, por relaciones personales conflictivas o cualquier cuestión que le limite su vida. También está indicada a las personas que quieran un profundo crecimiento personal, recordando sus dones y cualidades para conocer el viaje de su alma.

Beneficios de la Terapia Regresiva:

Sanación física, emocional, mental y espiritual. Sanación de relaciones conflictivas, liberación de lazos kármicos, reducción del estrés, relajación, autoconocimiento, crecimiento personal y comprender y perdonar que cada experiencia es parte de un camino de evolución.